miércoles, 29 de noviembre de 2006

Obra de Antonio Berni.
Pues hoy hablaremos de "Métodos Alternativos para el Recuento de Asistentes a Manifestaciones" o lo que es lo mismo, del MARAM.

El primero de los métodos, es el denominado "Método Agresivo de Recuento" o MAR.
El MAR consiste en disponer de algunos cientos de antidisturbios rodeando a los manifestantes y, una vez concluida la manifestación o en el momento que se estime oportuno, comenzar a repartir leña. En este punto se establecen dos opciones deferentes, el MAR de cooperación y el MAR de estimación.

En el primero, los entrañables agentes del orden solo deben golpear una vez a cada manifestante y llevar la cuenta de porrazos. Y los manifestantes deben de avisar ante la posibilidad de nuevos porrazos. Con este método, lo blandos y cobardes no recuentan, algo que es justo ya que si se acude a una manifestación es con todas las consecuencias y si no se está dispuesto a recibir palos es como si no se hubiera ido. Por otro lado, los temerarios pueden contar por dos, tres o más. Situación también justa porque un tío dispuesto a que le inflen debe valer por más de un manifestante. Una vez disuelta la manifestación, los policías reportan a su superior el número de porrazos y ya se tiene el número exacto de asistentes.

En la segunda variante, los policías entran a sangre y fuego, repartiendo a diestra y siniestra a todo lo que se menee y sin piedad. Posteriormente, aplicando un algoritmo que tiene en cuenta el numero de ingresados por traumatismo, el número de agentes, el tiempo de represión y la extensión de la zona, se tiene el número de asistentes a la manifestación.

El segundo de los métodos es el "Método Tradicional de Recuento", en el que bien mediante el reparto de papeletas numeradas o la recitación del número de viva voz, se calcula el número exacto de manifestantes. Ambas técnicas tienen sus inconvenientes. La de entrega de papeletas, que puedes quedarte corto y haber hecho de menos, pero luego siempre las puedes usar para rifar un jamón o algo. La de la recitación de viva voz, el que cuando llegas al número "un millón doscientos noventa y nueve mil, novecientos noventa y ocho", por ejemplo, que es un poco largo de decir. Además, si alguien se equivoca, hay que volver a empezar con lo lioso que es eso.

Otro de los disponibles es el "Método Torno", consistente en la ubicación de unos tornos (como su nombre indica) en algún punto del recorrido y sistemas de cierre que nadie pueda salirse del recorrido y volver a pasar. El inconveniente es la presencia de pancartas y la dificultad para pasar con ellas los tornos y el echo de que los manifestantes se puedan sentir como borregos.

Un tercer método, aunque algo más agresivo, es el "Método Terminal de Recuento", el temido MTR. En este sistema se procede al exterminio de todos los manifestantes y a su introducción en ataúdes, que luego son contados. Con este sistema se elimina la posibilidad de contar al mismo manifestante dos veces y se crean puestos de trabajo para el exterminio, la recogida y la limpieza de la zona. No obstante, se imposibilita que los mismos manifestantes se manifiesten dos veces por lo mismo (o por otras cosas claro), con lo bonito que es eso.

Hasta aquí, los métodos empíricos de recuento. Entre los estimativos tenemos el "Método Personal de Estimación" o "Método Alcaraz" (por su inventor), que consiste en decir el número que te salga de los mismísimos y llamar manipulador a cualquiera que se atreva a cuestionarlo.

El "Método FJL-PJR", muy similar al anterior. En este método se dice un valor y se repite hasta que, por obra de virlo-virloque, se vuelva real o se lo termine creyendo todo el mundo.

El "Método no me interesa", que básicamente consiste en decir un valor que ronde el diez por ciento de los valores dados mediante los dos métodos anteriores. Aunque parezca mentira, este valor suele dar una estimación bastante fidedigna, aunque no aceptada por casi nadie.

El "Método de la Línea Temporal" (gentileza de OsQar). Este es un método de estimación por esceso, es decir, que nos indica el mayor número posible de manifestantes. En este método se cuentan aleatoriamente varias filas de manifestantes y se calcula la media de "manifestantes por línea". Por otro lado se calcula la velocidad de desplazamiento del gentio y el tiempo que dura el evento. Con estos tres datos, se tiene el número, recordemos que sobredimensionado, de individuos presentes en la algarana.

El último de los métodos estimativos es demasiado técnico y prácticamente está en desuso. Consiste en tomar varias imágenes de la manifestación desde un helicóptero, estimar a partir de éstas el número de manifestantes por metro cuadrado y el número de metros cuadrados que ocupaba la manifestación, obteniéndose un valor bastante real. Pese a que su resultado suele ser el más aproximado, casi nadie recurre a él porque los otros métodos estimativos producen resultados más óptimos para los intereses del que los usa.


Y eso es todo. Si conocéis algún otro método, no dudéis en comentármelo.


3 comentarios:

ÓsQar dijo...

A mí se me había ocurrido uno, pero no les ha gustado a los chicos del Manifestómetro :_-(

Naveganterojo dijo...

Yo se otro sistema,se hace que la gente alze el brazo,(recordar la plaza de oriente)luego se les hace gritar,¡presente!,un señor escondido graba las voces,luego descuenta los bocadillos,las botellas de agua,la gasolina de los autocares,y le salen un millon trescientos mil manifestantes,chupao.

sensei dijo...

Ese también me ha gustado, prometo que será incluido.

Que tal un título como "Método de Carálsol"?